Por Ricardo Acuña (Especial para LBD)
Todo un país expectante por Argentina. Tuvo tres claras oportunidades y la fortuna, quizás, fue la máxima culpable de todo. También Claudio Bravo tuvo el match de su vida, salvando a Chile de un cabezazo de Agüero que tenía inexorable destino de gol.
Higuaín erró un gol «casi hecho» y Messi más Biglia, terminaron de derrumbar emociones acumuladas de campeonato. Chile jugó un partido inteligente, resistió en gran parte del primer tiempo con diez jugadores, Argentina no logró marcar y lo fue dejando crecer.
Estadísticas frías indicarán que el dominio territorial argentino fue mayor,las chances y la posesión también. No hay merecimientos y menos en el fútbol sudamericano.
Sin duda los dos mejores equipos del continente, que repitieron las finales y el resultado (0-0 en 2015 y en 2016) protagonizaron esta cerrada definición. En el medio de estos 2 empates a cero, Argentina batió a Chile 2 veces:
Eliminatorias y en el primer partido de esta copa que anoche se escapó. Nuestra selección perdió por penales. cientos de análisis (no en caliente) se pueden hacer. Messi, el mismisimo Lionel Messi declaró luego del final triste que no volverá a calzarse la celeste y blanca.
«Lio» sufrió esta final, a tal punto que cuando tuvo que patear su penal, lo erró. Impensado. Increible, máxime teniendo en cuenta que Romero se había «vengado» de Arturo Vidal un minuto antes. Sin embargo, Messi no convirtió.
La presión jugó su carta en ese preciso instante, supremo instante, y la dirección más la elevación hicieron perder ese balón sobre el travesaño. De la emoción de la atajada de Romero a la desilusión del yerro del gran capitán.
Luego Mascherano cerraba su puño, el «Kun» convirtió y Biglia volvió a fallar. Festejo chileno, merecido por ambos, cualquiera de ambos equipo merecía el título, nadie hubiese protestado en Chile si Argentina ganaba.
Nuestra pasión apenas terminado el partido nos hace reaccionar de manera tajante, sin temor a equivocarme. Nuestra selección sigue encumbrada entre los mejores del mundo, sin dudas (Chile entró hace varios años entre los 10 mejores equipos del mundo) y habrá quizás que replantear varios temas en cuanto a los seleccionados.
Se tejen y tejerán en esta semana cientos de hipótesis y planteos, ideas y críticas. Lo cierto es que Argentina alcanzó otra vez una final y no pudo campeonar. El fútbol da revanchas y lo bueno es que el material humano está.
