Por Matías Pouso (Corresponsal LBD en CABA)
El conjunto dirigido por Diego Placente reaccionó a tiempo y le dio vuelta la final a Brasil al vencerlo por 3 a 2 y quedarse con el título Sudamericano de la categoría.
El seleccionado nacional juvenil se consagró campeón del Sudamericano Sub-15 tras derrotar en el partido decisivo a Brasil por 3 a 2, luego de estar perdiendo por 2-0. El estadio sanjuanino Del Bicentenario fue el marco de este emocionante clásico del fútbol mundial, en este caso en versión junior.
Miles de simpatizantes se hicieron presentes para ver a estas promesas del fútbol nacional, todo era una fiesta hasta que a los 33 minutos del primer tiempo Kaio Jorge abrió el marcador para los brasileros. Todo se puso aún más cuesta arriba apenas comenzada la etapa final, a los dos minutos el defensor Francisco Flores con una pifia convirtió en contra de su propia valla el segundo tanto visitante.
La reacción albiceleste no se hizo esperar, apenas dos minutos más tarde, Matías Palacios anotó el descuento, y ahí las esperanzas de la remontada comenzaron a sentirse.
Volvieron a pasar 120 segundos y Matías Godoy consiguió el empate con un derechazo alto que se coló entre el travesaño y las manos del arquero.
Todo apuntaba a una vibrante definición por penales, pero faltando tan solo tres minutos, a los 37 de la etapa final (en esta categoría se juegan dos tiempos de 40), de un corner desde la izquierda apareció el cabezazo salvador de Bruno Amione, que tomó carrera desde el borde del área chica y ganó de arriba para anotarse en la historia del fútbol juvenil argentino.
Esta fue la primera vez en ocho ediciones que Argentina se consagra campeón de este certamen, mientras que los brasileños ya conocieron las mieles de un campeonato en cuatro ocasiones: 2005, 2007, 2011 y 2015.