Por Agustín “Colo” Aguirre (Corresponsal LBD en La Pampa)
En el inicio de la segunda fase de la LNB Peñarol se mudó a la casa de Quilmes, el “Once Unidos”, por estar ocupado el Polideportivo y paradójicamente en su primer juego se alzó con la punta de la Zona Sur tras vencer a Bahía Basket por 69 a 58. El nuevo extranjero Giddens, con 23 tantos, fue el goleador del partido. La foto es gentileza de www.ligateunafoto.com
Bajo un calor sofocante en Parque Luro el campeón de la Liga Nacional tuvo un rendimiento flojo en ataque, con baches, pero encontrando soluciones en Justin Ray Giddens, quien se lució con 23 puntos (7/11 en dobles y 2/4 en triples), además de aportar 13 rebotes, 4 recuperos y 3 asistencias. En el otro aro, tuvo una gran defensa, logrando imponerse a la rotación que ofreció Bahía Basket.
El primer cuarto tuvo un intenso ritmo pese al calor que sacudió a Once Unidos. Poco aire, mucha transpiración, y dos equipos que corrieron y fueron de menor a mayor. Tras un inicio de ambos erráticos, Peñarol llegó a la mitad del parcial sacando una buena diferencia (12-6), con triples de Leiva y Giddens.
Ginóbili en la visita apeló rápidamente a la extensa rotación de su plantel para torcer el rumbo. Sacó al debutante base panameño Trevor Gaskins (1/5 en tiros de cancha, desordenado) y puso a Diego Gerbaudo.
También ingresaron Vaulet y Lucio Redivo, que con un doble y un triple respectivamente sentenciaron el parcial de 7-0 para dejar a Bahía Basket al frente 12-13 (en el medio, minuto de Rivero).
Hasta el final del segmento, los dos se fueron prestando el marcador. Eslava complicó bajo las tablas (6 puntos) en la visita, y el «Milrayitas» cerró con un buen pasaje de Boccia (4 puntos) y la preponderancia de Giddens para el 20-17.
El segundo cuarto parecía comenzar a la perfección para Peñarol. Con un triple de Giddens y una asistencia del norteamericano para Leiva, sacó la máxima en cancha (25-17), al minuto y monedas.Ginóbili pidió tiempo muerto, ajustó su defensa, y todo comenzó a ser cuesta arriba para los marplatenses, en un tramo ordinario del partido.
Por un lado, Bahía Basket tardó seis minutos y medio para anotar sus primeros puntos de cancha (25-23, a 3m16s), aunque fue limando la diferencia desde la línea. Pero peor aún, Peñarol entró confundido, sin referencias con los aros y por la buena defensa visitante tuvo una sequía de 6m53s sin anotar siquiera un punto (coincidentemente con Giddens de descanso). En el medio, 0/10 en tiros de cancha, fallando hasta desde la línea (2/7 en todo el primer tiempo).
De la mano de Vaulet y el ingresado Whelan, Bahía Basket empató en 25 (parcial de 7-0) y pasó al frente con un triple de Byró. La visita se fue al descanso al frente (29-30), y Peñarol preocupado por su paupérrima producción en ataque (9 de 23 en dobles en 20 minutos). Aún así, mantuvo su defensa y pese a la sequía Bahía Basket solo se fue ganando por un punto.
Al retorno del descanso, Peñarol y Bahía Basket volvieron a proponer un juego intenso, de posesiones cortas. El local mejoró sus porcentajes en ataque, pero permitió a la visita también anotar.
De la mano de Giddens (4 puntos), Leiva (4) y un triple de Sahdi, el «Milrayitas» recuperó el liderazgo 43-38 en 3m40s de parcial. Bahía empató con triple de Gaskins y doble de Eslava.
El elenco de Rivero pudo salir de ese leve aprieto rápidamente. Aparición lúcida de Luciano Massarelli (asumió la base ante el mal partido de Sahdi y la ausencia del lesionado Konsztadt). «Lucho», con un pasaje de cinco puntos (doble y triple), devolvó la ventaja que luego agrandaron Leiva y un fenomenal Giddens (53-45, parcial de 9-0). Así, en el cierre del penúltimo parcial, Peñarol empezó a quebrar la historia.
Con una defensa acorde a su historial, con Boccia como «perro de caza», Peñarol no tuvo problemas en el último segmento, y mantuvo esa ventaja hasta el final. Bahía Basket se quedó sin argumentos y cayó ante la telaraña «Milrayitas», que jugó los diez minutos con sus cuatro titulares más la buena conducción de Massarelli.
Apenas 11 puntos pudo anotar la visita, con apenas una conversión de cancha en casi ocho minutos. Como foto de la noche, quedó una estupenda acción individual de JR Giddens: a 4m24s del final, enterró la pelota en el aro con un salto marca NBA, lo que decretó el aplauso cerrado de todo el estadio para el norteamericano que acompañó su acción con un festejo a puro grito y show. Recibió la falta y terminó siendo una jugada de tres puntos (64-51).
Peñarol enseguida reaccionó y a tiempo, y terminó marcando las diferencias que existen entre ambos equipos. Bahía Basket luchó hasta donde pudo, con dignidad. Pero el campeón de la Liga Nacional defendió como bien puede hacerlo, y pese a la irregularidad ofensiva, encontró en Giddens una mano sólida para solucionar sus ataques.
Síntesis
Peñarol (69): Fabián Sahdi 3, Adrián Boccia 12, Justin Giddens 23, Leo Gutiérrez 5 y Martín Leiva 17 (FI) Luciano Massarelli 9, Alejandro Diez 0, Franco Giorgetti 0 y Gabriel Fernández 0. DT Fernando Rivero
Bahía Basket (58): Trevor Gaskins 7, Julio Mázzaro 0, Mariano Byró 3, Jamaal Levy 9 y Ariel Eslava 10 (FI) Diego Gerbaudo 5, Juan Pablo Vaulet 6, Lucio Redivo 8, Lisandro Rasio 5, Omar Cantón 2 y Gastón Whelan 3. DT Sebastián Ginóbili
Parciales: 20-17, 29-30, 53-47
Fuente: www.0223.com.ar