Por Oscar “Huevo” Sánchez (Colaboración especial para LBD)

Cuando restan tan solo cinco días para el comienzo del mundial el dueño de casa se enfrentó con la selección de Julio Lamas. Triunfo categórico de los españoles por 86 a 53.  El experimentado entrenador, amigo personal y de nuestro sitio, Oscar “Huevo” Sánchez, analizó el juego y la realidad del conjunto argento de cara a esta nueva cita mundialista. Compartimos su escrito. La foto es gentileza de www.pickandroll.com.ar

«Es evidente que luego de ver el juego contra España uno puede pensar que ya tenemos otra realidad. Si que la tenemos. Pero yo no sería tan absoluto en ser contundente con el análisis, pero si ver la realidad en cuanto lo que se puede hacer con este material humano argentino.

Previo a un torneo y en descarga de nuestro equipo no se pude confiar si este es el nivel. Históricamente ellos, siempre tuvieron amistosos en todo lo que implica esta palabra, amistoso.

Después quiero que sepan que ni USA tienen los pívots que tiene el equipo Español (Ibaka suplente) y mucho más aun el perímetro veloz y con el que conforman toda su plantilla.

Son dos equipos titulares, con el agregado si quieren de dos suplentes, no es medida. Ellos serán candidatos al título. Nosotros no.

Para ya expresar las virtudes y debilidades de nuestra selección, comienzo a decir que a esta altura Argentina, debería saber a qué va a jugar y para quien.

Al estar sus estrellas a nivel, se sabía primero que inicial plasmaría en campo y además quien era sus primeras opciones.

Ejemplo de entradas al pick and roll para generar juego inmediato o no, segundo en saber que Emanuel era el abanderado ofensivo en cierres y juego perimetral y ni hablar la primera opción de Luis Scola interior.

Hoy y por lo que estamos viendo, Argentina tiene una inicial simbólica en Delia (entra y luego sale para no hacerlo casi nunca más) después no tiene identificado quien es el dos a este nivel.

Pienso que Priggioni no debería jugar junto a Campazzo. El no necesita ayuda para subir el balón,  necesita definidores.

Campazzo y él no deben jugar ni 25 ni 15, sino que 20 y 20. El experimentado para abrir el juego y cerrarlo. Facundo para jugarlo entre esos tiempos.

La falta del 2 es con la del hombre alto a este nivel, la más notoria. Solo Safar es el tirador natural, y pívot menos.

El puesto del 2 no se compensa con poner un bajo o un alto. Se debe poner un tirador en disfrute de cortinas y que habrá el campo haciéndolo más ancho y dar ante esa posición camino al pickandroll de Scola y Pablo.

Algo que no se está viendo en la selección como antes. Scola que es el único poste bajo que debe jugar y que puede, está tomando sus tiros de 6 metros, encima fuera de su radio habitual. El codo del rectángulo, analizando el estilo y la manera de jugar contra equipos más humanos que el de España, pensaría que lo primero que debemos hacer es saber para que estamos.

La realidad es que estamos para cuidar a ese resto de estrellas que quedaron y dar su participación activa en cada lugar y espacio donde son buenos. Pablo, “Chapu” y Scola deben morir en campo tomando sus responsabilidades los minutos que estén, el resto debe saber para qué están y cumplir en lo que se pueda. Nada de democracia.

La realidad es cruda, ahora es limitada para lograr objetivos de podio. Los puestos que en nuestra liga son 3 y 4 a ese nivel son más grandes y todos más rápidos y saltarines. Siempre tenemos desventajas.

Es lo que hay, pero como exprese en mi introducción de la nota, no hay que darla por muerta. El corazón sigue siendo argentino, junto a la picardía y conocimiento.

Aun con tantos escases de puestos claves que sabíamos desde hace tiempo que se terminarían. Sin embargo no se hizo nada para este recambio generacional sufriera menos.

Uno puede dar oportunidades a jóvenes, pero saben qué?  Esto no es un problema de edades, es un problema de buscar gente idónea para puestos de primer mundo (2,08 a 2,12 en proyección.) y enseñarles, para si luego poder dirigirlos».