Por Lisandro «Licha» Muhoberac (Discapacidad para LBD)
El 3 de diciembre se conmemoró el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, una fecha para velar por los derechos de los individuos del mundo que persiguen un mundo más inclusivo.
El 13% de la población tiene alguna discapacidad; es decir, poco más de 5 millones de personas, según datos del Censo Nacional de Población, Hogares y Viviendas del INDEC.
Este dato duro, debería sensibilizarnos y ayudarnos a entender que las personas con discapacidad, son un colectivo emergente dentro de la sociedad.
Desde lo deportivo, año tras año, se crece a pasos agigantados, y no desde los resultados, o no solo desde estos, sino desde las posibilidades de participación.
Juegos ParaEpade, Juegos Nacionales Evita, Juegos Argentino de Invierno y de Playa, más la concreción de los próximos Juegos ParAraucania, hacen que los deportistas patagónicos se aseguren participaciones deportivas desde los 11 años (edad en la que se puede ingresar a los Juegos Nacionales Evita), hasta los 25 años (edad máxima en ParAraucania), y más también, debido a que los Juegos Argentinos tanto de playa, como de invierno, no tienen límite de edad. Y de esto se trata la Inclusión. De posibilidades. De iguales posibilidades.
De buscar brindar como sociedad un marco donde todas las personas puedan desenvolverse en todos sus ámbitos.
No hay que ser un estudioso en la materia para darnos cuenta de que el Deporte es una herramienta, un canal, una vía de Inclusión Social. Todo esto conforma el vaso medio lleno.
Como sociedad, aún nos falta mucho. Nos falta ver un poco más allá de lo que nos pasa, falta entender que los accesos prioritarios están destinadas a una población determinada, nos falta ver que las rampas no se obstaculizan, nos falta humanizar a las personas con discapacidad, y entender que primero son personas.
Claro que para esto se necesita muchísimo más esfuerzo, más inversión, mas “pensar en el otro”. Nos falta más utilizar el lema preferido de las personas con discapacidad “Nada sobre nosotros, sin nosotros”, empatía, consideración, solidaridad, tolerancia, paciencia…son valores y características que están escaseando hoy en día en toda la sociedad.
Desde nuestro lugar de trabajo, todos los días intentamos generar acciones en post de mejorar la calidad de vida de nuestros alumnos.
Creyendo firmemente que nunca alcanza, pero que nuestro accionar colabora a emparejar un poquito la balanza, y que este mundo sea un poco mas justo.
