Por Agustín “Colo” Aguirre (Corresponsal LBD en Mar del Plata)
Argentino se topó con un Peñarol que estuvo intratable desde 6,75 en el primer tiempo y perdió otra vez más en el 2014. Sin Balbi ni Cangelosi lesionados, el local remontó 23 puntos, pero cayó por 3; Bahía lo hizo de nuevo, le ganó de nuevamente a Quilmes en el Once Unidos por 81-77 con Nocedal como figura con 29 tantos. Foto gentileza www.ligateunafoto.com
Sigue ganando
Peñarol estuve intratable desde 6.75 en el primer tiempo, se durmió en el segundo tiempo y casi pierde un partido que tenia controlado frente a Argentinos De Junin que con muchas ganas remonto una desventaja de 23 puntos.
El primer cuarto del partido demostró que Argentino no iba a rendirse, al menos hasta dejar todo lo que tenía para dar. Más allá de esto, volvió a chocar contra las estrellas con las que cuenta Peñarol. Por ejemplo, Leonardo Gutiérrez con una gran inspiración (4/6 en cancha) no dejó que el Azul se termine de acercar. Claro, no sólo el 10 estaba iluminado: Facundo Campazzo hizo todo para habilitar una y otra vez a sus compañeros y el que mejor la aprovecha fue Boccia
Además, con las bombas a las cuales el Milrayita tiene acostumbrado a todos borró de un plumazo el esfuerzo de los de Adrián Capelli. Con una efectividad Tremenda: 6/7 desde 6,75. Por lo que se reflejó un 32-17 al momento del descanso de los primeros 10 minutos
Poco se modificó en el segundo parcial. De hecho, la visita clavó dos bombazos que lo llevaron a sacar una tremenda ventaja pensando en todo lo que restaba (7:10) y el “Milrayita” con 8/10 en zona externa logró irse 40-22.
Lógicamente con este contexto, más las lesiones de Franco Balbi y de Juan Cangelosi, las esperanzas comenzaron a esfumarse pronto. Ni hablar que esa sensación se hizo real una vez que la distancia pareció ser irremontable tras que Gutiérrez clave dos bombas más para que Peñarol se vaya al descanso largo con una máxima de 23 (33-56).
Si bien la cara defensiva se modificó en comparación a la etapa inicial para los locales, la brecha resultaba prácticamente imposible. Por eso, a pesar del cambio y la tremenda efectividad ofensiva, terminó yéndose 12 abajo (68-56) luego de un doblazo de Campazzo en el cierre.
Síntesis
Argentino (75) : Lucas Pérez 14, Marcos Saglietti 12, Santiago Arese 17, Marcus Melvin 18, Anthony Myles 6 (FI) Andrés Landoni 4, Emiliano Basabe 4, Martín Delgado 0. Dt: Adrián Capelli.
Peñarol (78): Facundo Campazzo 12, Adrián Boccia 13, Franco Giorgetti 0 (x), Leonardo Gutiérrez 21, Martín Leiva 16 (FI) Axel Weigand 8, Gabriel Fernández 2, Isaac Sosa 6. Dt: Fernando Rivero.
Progresión: 17-32, 33-56, 56-68 y 75-78
¿Este partido no es repetido?
Bahía Basket le ganó de nuevo a Quilmes en Mar Del Plata y repitió lo mismo de la primera fase, Quilmes pagó caro los errores del cierre y volvió a caer derrotado.
El primer cuarto fue todo de Bahía. Marcando una diferencia de velocidad, concentración y eficacia muy alta contra un Quilmes apagado. El equipo de Ramella ya dejó de ser sorpresa y ahora tiene que salir a defender el 3er puesto. Y para hacerlo debe jugar como tal. Salió como si el campeonato recién empezara y “a ver qué pasa”.
La diferencia fue tan grande que fue un baile de Bahía Basket ante un equipo sin respuestas. Recién cuando Ramella movió el banco (12-24 abajo) hubo un principio de reacción con el triple cambio y el ingreso de Galizzi-Maciel y Vildoza.
Matías Nocedal estaba iluminado y con un 3/3 en triples llevaba las riendas de la visita. Le sumo dos dobles y un libre para firmar su casillero en 14 puntos en los primeros 10 minutos. A su lado el complemento ideal fue Lisandro Rasio (10 pts), quien atacó perfecto adentro y afuera generando todo tipo de desajustes defensivos. Solo Walter Baxley por condición individual (10 puntos) pudo arrimar algo de gol en el local.
La historia de la mejoría para Quilmes se acentuó en el comienzo del segundo cuarto cuando la doble base entre Vildoza y Sahdi funcionó a pleno y mientras Balxey anotaba goles de todos los colores (2 libres, 2 triples y 5 dobles) Tayavek Galizzi se hacía gigante en la pintura.
La rotación desde el banco de Sepo Ginóbili descolocó además un equipo que tenía todo dominado (ganaba 17-32). Entonces lala producción ofensiva de Bahía Basket se apagó notablemente. Tuvo además siete pérdidas producto de la intensidad defensiva que le metió Quilmes y de repente llegó el empate en 37 con parcial 22-5 a 1:45 para ir al descanso largo. El segundo tiempo comenzaría con el partido en tablas en 41 puntos por bando.
Ramella ya había decidido para sí mismo que Walter Baxley jugué los 40 minutos. Después de un primer tiempo de ensueño donde el extranjero metió 28 puntos (el 70% de los puntos de su equipo) Baxley parecía intocable.
Pero el americano sabiendo que jugaría todo el partido se pasó todo el tercer cuarto pasando el balón, sin tomar más que un solo tiro al canasto (a falta de un segundo para que termine el 3er cuarto) y reservando energías para el final. Su producción fue nula y Quilmes extrañó la intensidad de un perimetral que le diera gol.
Aunque resulte increíble los 4 triples de Baxley del primer tiempo fueron los únicos cuatro que anotó el equipo en todo el partido. Sin Piñero nadie se hace cargo de abrir la defensa rival desde afuera.
Matías Nocedal volvió al campo para ir decorando un juego brillante. Acelerando después de la transición y en contraataque fue letal. Llegó hasta el aro, desafió pivotes y convirtió 4 dobles seguidos, más dos libres para entrar al último cuarto como goleador de su equipo ya con 24 puntos.
De todos modos Quilmes ganó el tercer segmento por la fuerza de Diego Romero en la pintura (9 puntos) que le sacó diferencias a los internos de Bahía.
Cuando abrió el último parcial Quilmes tomó la máxima con un doble y falta de Baxley (66-55) tenía todo servido para ir derecho al triunfo pero Bahía volvió rápido al juego con un segmento final brillante de Diego Gerbaudo quien había tenido un mal partido hasta allí y de Ivory Clark, otro que la venía pateando.
Ambos fueron la llave de la victoria. Primero Gerbado con dos triples para descontar la ventaja y la marca sobre Lucas Vildoza. Luego para generar espacios para que Lisandro Rasio complete también un partido muy interesante.
Quilmes respondió con la conexión Vildoza-Galizzi, pero Ramella le puso fin a esa dupla con el reingreso de Ghersetti que no entró nunca en partido la dupla Galizzi – Maciel fue el que mejor le había funcionado a Quilmes pero no volvió a repetirse.
Le pusieron la pelota en manos de Baxley que erró los últimos 4 dobles que tiró. Algunos salieron de adentro bordeando el aro, A veces esa prueba puede fallar. Y no hubo plan B. Nadie en Quilmes ayudó el empuje de Baxley y la ofensiva se cayó a pedazos.
Para colmo ganado por dos (76-74) a falta de 25 segundos y después de una tapa de Vildoza a Gerbaudo que parecía el partido, Bahía se mandó un jugadón en ataque que terminó en triple de Clark. Después de un minuto, “Sepo” Ginóbili dibujó una jugado donde Clark (que venía 0/4 hasta allí) demostró que le sobra actitud. La clavó de 7 metros y medio y para cerrar el juego metió doble tapa en la misma jugada. A Baxley en el mandada del uno contra uno y a Vildoza en el rebote de la tapa le metió otra más sumando su cuarta en el partido y así le gano a Quilmes que nota que nunca estuvo cómodo en el juego.
Síntesis
Quilmes (77): Fabián Sahdi 0, Walter Baxley 37, Federico Marín 3 (x), Mario Ghersetti 1 y Diego Romero 16 (FI); Tayavek Gallizzi 15, Luca Vildoza 5, Maximiliano Maciel 0 (x), Thiago Moledous 0. DT: Leandro Ramella
Bahía Basket (81): Diego Gerbaudo 12, Matías Nocedal 29, Franco Amigo 0, Lisandro Rasio 19 e Ivory Clark 7 (FI), Agustín Ambrosino 2, Maurice McNiel 2, Mateo Gaynor 3, Gastón Whelan 5, Gonzalo Martínez 0, Lucio Redivo 2. DT: Sebastián Ginóbili
Parciales: 15-30, 41-41, 61-55