Por Matías Pouso (Corresponsal LBD en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires)
El español repitió el título obtenido en 2013 al vencer en el partido decisivo al suizo Stanislas Wawrinka por 6-4. 3-6 y 6-1. Es el quinto año consecutivo que un tenista ibérico se consagra campeón del torneo más importante que se disputa en Argentina.
Si algo lo destaca a David Ferrer por sobre el resto de sus competidores es la capacidad de soportar las adversidades y hacerse fuerte cuando su rival lo domina dentro de una cancha de tenis. La final de hoy fue un claro ejemplo de esto.
Stanislas Wawrinka demostró en varios tramos del partido que todo lo que proviene de suiza, tiene clase y estilo, su revés a una mano deleitó a todos los espectadores que concurrieron al Buenos Aires Lawn Tennis Club a pesar de que ningún coterráneo se disputaría el título.
El primer set comenzó con un claro dominio del número 17 del mundo, la pelota salía de su raqueta con una potencia y ubicación tal que ni la velocidad de piernas de Ferrer era suficiente para soportar dichos embates.
Wawrinka consiguió un quiebre de saque pero no pudo capitalizarlo ya que Ferrer lo recuperó en el game siguiente, esto sería clave en el desarrollo del partido, la capacidad de Ferrer de mantenerse cerca o de estar arriba en el marcador.
Sin embargo, llegado el final del parcial, las razones por la cual el 4 del mundo se encuentra en esa posición salieron a la luz, su defensa excepcional encontró como aliada una derecha fulminante que el helvético ya no pudo controlar.
En la segunda manga Wawrinka se mentalizó en no volver a cometer los errores que le hicieron perder el set anterior. Cada golpe hubiese sido un tiro ganador si no hubiera estado Ferrer del otro lado de la red, pero a pesar de la impecable defensa del español, el suizo capitalizó los puntos clave y estiró la definición a un tercer parcial.
Ya en el set definitivo, el nacido en Lausanne siguió manejando los hilos del partido consiguiendo un quiebre de servicio en el primer game, pero poco le duraría la alegría. El número uno español recuperó el saque y de ahí en más la final lo tendría como único protagonista. Un par de bolas mal cantadas en contra del suizo le hicieron perder la concentración y en consecuencia, el partido.
El estadio principal del BALTC vibró con cada punto alentando a ambos finalistas, y estalló en aplausos una vez que el encuentro se consumó. El cariño del público argentino hacia Ferrer ya tiene varios años de vida, y Wawrinka este año con su calidez y humildad supo ganarse el corazón de los aficionados tenísticos que aprovechan las contadas posibilidades que tienen de ver a sus ídolos bien de cerca.
David Ferrer es el primer tenista después de Guillermo Vilas que repite el título en Buenos Aires, y por primera vez desde 1995 que ningún argentino juega el partido decisivo ni en el cuadro de singles ni en el de dobles.
En Marsella, Jo-Wilfried Tsonga se coronó campeón tras vencer a Tomas Berdych por 3-6, 7-6(6) y 6-4 en la final. La próxima semana se disputarán los ATP 500 de Acapulco y Dubai y el 250 de Delray Beach.
En los Emiratos Árabes Juan Martín Del Potro será el único argentino, pero el atractivo lo pondrán la presencia de Novak Djokovic, Roger Federer, Tomas Berdych , Jo-Wilfried Tsonga, Janko Tipsarevic además de la del tandilense. En México, David Nalbandian y Juan Mónaco comandarán a la nueva legión argentina en un torneo que tiene a Rafael Nadal como máximo favorito.
