Por Javier Nicolás Baroli (Corresponsal LBD en Río Gallegos)
Con los argentinos Eber Banega y Lucas Ocampos como protagonistas, los dirigidos por Lopetegui derrotaron 3 a 2 al Ínter de Lautaro Martínez para gritar campeones.
Apasionante y electrizante. Así fue la final del segundo certamen en importancia, luego de la Champions, en el viejo continente.
Y es que llegaban dos equipos con propuestas similares, de ir a buscar, de proponer, de arriesgar y así fue el partido, con alternativas cambiantes pero con una cuota de emotividad a las que no nos tienen tan acostumbras las finales.
Desde un principio ambos equipos intentaron mostrar las ganas de ser protagonistas. Sin embargo el Ínter de la mano de Lukaku lograba abrir el marcador de penal.
A partir de ese momento apareció el poderío ofensivo del Sevilla de la mano del holandés De Jong para marcar un doblete. Transitoriamente había empatado el uruguayo Godin para los italianos.
De esta manera, Sevilla sigue siendo el equipo con más títulos en este certamen, ya que sumó su sexta Copa de Europa League y permitió que tres argentinos como Banega, Ocampos y Vasquez griten campeon en el viejo continente.
