Por Javier Nicolás Baroli (Corresponsal LBD en Río Gallegos)
Regreso soñado de los hinchas de River a su casa. Triunfo inolvidable por 2 a 1 frente a su clásico y eterno rival, Boca Juniors. El resumen en La Bestia Deportiva.
Crónica de una tarde inolvidable. Desde horas tempranas el monumental se vistió de gala. Los invitados llegaron temprano a la cita. Muchas dudas, nervios por el tiempo que transcurrió para este reencuentro. A las 17 horas era la cita para que la orquesta principal haga su presentación y puntuales comenzaron con su fiesta.
El punto de inflexión lo marcó la expulsión de Marcos Rojo. Fueron apenas dos minutos fatídicos para el «Xeneize». Posterior a ello, llegó el primer gol de Julián Álvarez, con un «bombazo» que hizo estallar a todo el estadio.
Aturdido, desorientado Boca no pudo reencauzar el rumbo y el «Millonario» lo aprovecho. Álvarez, por escándalo el mejor jugador del fútbol argentino, marcó el segundo para el delirio de su gente.
En el segundo tiempo River siguió con su intensidad, pero no pudo ampliar el marcador. Boca se dedicó a evitar que el resultado sea más abultado. Gallardo hizo entrar a Ponzio, quien jugó su último Superclásico para que la fiesta sea completa.
Sobre el final del partido, en tiempo de descuento, Zambrano con un cabezazo le puso tensión al clásico pero fue solo anecdótico.
Victoria de River ante su gente por 2 a 1 en una tarde que vivirá en el recuerdo de las más de 40 mil almas que coparon, con aforo controlado?, el «Monumental».
