Por Matías Pouso (Corresponsal LBD en CABA)
El conjunto balcánico venció este fin de semana de visitante a su par francés con un contundente 3 a 1 y se quedó con la segunda Copa Davis en su historia. Marin Cilic fue el gran héroe de la final al quedarse con sus dos singles.
Desde 2019 nada será igual en el mundo que rodea a la máxima competencia del tenis por equipos. El tradicional formato que disfrutamos hace más de un siglo, vio este fin de semana su última edición.
En la final que se disputó desde el viernes en el Stade Pierre Mauroy de Lille, Croacia fue netamente superior al conjunto local.
Ya en la primera jornada los balcánicos demostraron que les sienta bien definir este tipo de competencia fuera de casa (fueron campeones en 2005 contra Eslovaquia en Bratislava, y perdieron la final del 2016 con Argentina en Zagreb)
En el primer punto de la serie, Borna Coric adelantó a los visitantes con un cómodo triunfo frente a Jeremy Chardy por 6-2, 7-5 y 6-4 en dos horas y 19’ de juego. A continuación, Marin Cilic tuvo que trabajar apenas un poco más el triunfo que su compañero pero terminó derrotando al experimentado Jo-Wilfried Tsonga por 6-3, 7-5 y 6-4 en dos horas y 22’.
El sábado, la dupla compuesta por Pierre-Hugues Herbert y Nicolás Mahut volvieron a darle esperanza al público local logrando un apretado triunfo por 6-4, 6-4, 3-6 y 7-6 (3) frente a Ivan Dodig y Mate Pavic tras tres horas y 38’ de juego.
Pero finalmente en el último día de competencia, el héroe de la serie dilapidó los sueños franceses. En dos horas y 19’ barrió al joven Lucas Pouille con un 7-6(3), 6-3 y 6-3 para darle la segunda Ensaladera a su nación, y la última disputada en este formato.
El líder croata, aseguró después del partido: «Este equipo lo ha hecho muy bien durante varios años. Hemos jugado muy bien esta temporada y Borna lo hizo genial contra EE.UU. Ha sido un esfuerzo común».
Francia, vigente campeón, le entregó el trofeo a Croacia en el mismo estadio en el que se alzó la Ensaladera de Plata el año pasado.
«Este es uno de los mejores equipos que hemos tenido. Después de siete años como capitán es un orgullo tener un dream team”, dijo Zeljko Krajan en la conferencia de prensa croata post partido.
Fue el fin de una era que duró más de 100 años, ya nada será igual en esta hermosa competencia que miles de fanáticos disfrutan anualmente.
Muchos celebran el cambio y el progreso, otros tantos añorarán las viejas épocas. El mundo cambia y el tenis no es ajeno a este cambio, tal vez dentro de un siglo miremos atrás y vitoreemos a los valientes que reescribieron la historia del deporte blanco. El tiempo lo dirá.