Por Matías Pouso (Corresponsal LBD en CABA)
El tandilense alzó este fin de semana su primer trofeo Masters 1000 al vencer a Roger Federer por 6-4, 6-7(8) y 7-6 (2) tras dos horas y 42 minutos de juego y luego de salvar tres match points. El triunfo lo catapultó al sexto puesto del ranking ATP.
Guillermo Vilas fue, es y probablemente será por siempre el mejor tenista argentino de todos los tiempos.
No obstante, hace casi 30 años nacía en la ciudad de Tandil un niño que pareciera estar destinado a pelearle palmo a palmo ese status a la leyenda marplatense ganador de 62 títulos ATP, incluidos cuatro torneos de Grand Slam.
Juan Martín Del Potro puso su foto en la historia grande del tenis hace nueve años, al coronarse campeón del US Open, torneo que soñó ganar desde que empezó a jugar a este hermoso deporte en el Club Independiente de Tandil cuando tenía tan solo siete años.
En el medio de esta historia pasaron más de 20 títulos en el circuito ATP, y los logros que obtuvo representando los colores de nuestra bandera, siendo doble medallista olímpico (plata en Río 2016 y bronce en Londres 2012) y líder indiscutido en la obtención de la única Copa Davis de la historia del tenis argentino.
Este domingo, en la final del Masters 1000 de Indian Wells, el destino lo cruzaría con su gran amigo e ídolo de la infancia, Roger Federer.
Mismo rival de aquella famosa final del Grand Slam neoyorkino que lo catapultó automáticamente a la elite del deporte blanco.
Luego de una batalla épica en la que tuvo que salvar tres puntos de partido, Delpo logró su primer Masters 1000 en el desierto californiano y lo hizo a lo grande: venciendo al cinco veces campeón de Indian Wells y actual número 1 del mundo, el mismo hombre que no había perdido en todo 2018.
El primer quiebre del encuentro llegó cuando el cotejo rozaba el cuarto de hora, el argentino aprovechó la primera oportunidad que dispuso para hacerse con el break, atacando el segundo servicio del suizo.
Desde el fondo de la cancha, Del Potro dominó los intercambios con su martillazo de derecha y se hizo más fuerte cuanto más lejos de la red estuvo.
En 34 minutos, con ese único quiebre, el argentino se adelantaba en el marcador: con diez golpes ganadores y tan solo tres errores no forzados se imponía ante un Federer que terminó la manga con once winners y mismo número de errores no forzados.
El segundo set empezó con chances de quiebre para Del Potro, pero esta vez Federer le negó la oportunidad de escaparse prematuramente en el parcial.
Con el trámite muy parejo, llegó el undécimo game, con el tandilense que dudó por primera vez en todo el encuentro y le otorgó al suizo sus primeras oportunidades para quebrar, que además significaban dos bolas de set para el suizo.
Primero con un bombazo de derecha y después forzando el error de su rival, el argentino salvó ambas.
El set solo podría dirimirse con un tie-break, allí ésta película de acción se transformó en un drama.
Federer sacó chapa de número 1 y se adelantó hasta el 6-3, pero ahí su gran amigo/rival resucitó como el ave fénix salvando cuatro set points, igualando el tanteador en 7 y hasta haciéndose con punto para el campeonato.
Pero ahí apareció de nuevo el Maestro para negarle la alegría y en su séptima oportunidad, igualó el encuentro.
El tercer y definitivo set fue una demostración de resistencia de ambos jugadores, que no quisieron dar ni una pisca de esperanza a su rival.
Los ocho primeros juegos fueron una partida de ajedrez en donde los finalistas mantuvieron sus servicios con total conservadurismo, sin mucho brillo pero con mucha firmeza.
De nuevo, como en la manga anterior, la tensión y electricidad fueron creciendo segundo a segundo.
Primero quebró Federer -el primer quiebre para él en todo el partido-, en un momento que pareció definitivo ya que en el game siguiente serviría para coronarse.
Pero la derrota no estaba en los planes de La Torre de Tandil, quien tras salvar tres puntos de partido, se quedó con el saque de su rival para poner el 5-5.
Y por si le faltaba dramatismo a esta épica final, el título se definió en los famosos penales del tenis.Y ahí todo fue para el gigante argentino.
Cinco puntos seguidos lo pusieron a milímetros de la victoria, ahí Federer logró un fugaz descuento pero nada que pudiera amedrentar el sueño casi consumado de Delpo de levantar su primer Masters 1000. Y con el 7-2 del tiebreak la victoria fue para el tandilense.
La cuarta fue la vencida para el número 6 del mundo, tras caer en las finales de Montreal 2009 (ante Andy Murray), Indian Wells 2013 (Nadal) y Shanghái 2013 (Djokovic), consiguió su tan ansiado primer Masters 1000. El segundo título en importancia tras el Abierto de Estados Unidos 2009.
Con esta conquista, Del Potro pasó a ser el primer argentino en coronarse en Indian Wells, en la misma semana en la que superó la barrera de los 400 triunfos y que estira su racha de la temporada a once victorias consecutivas y dos títulos (este se suma al obtenido en Acapulco).
Su próximo objetivo: el Masters 1000 de Miami. Su GRAN objetivo: la cima del ranking mundial.