Por Javier Nicolás Baroli (Corresponsal LBD en Río Gallegos)
La era Scaloni y Messi sigue dando que hablar. La revolución de una Selección que, con una mochila cargada de ilusiones, sigue enamorando en cada presentación, ya piensa en Qatar 2022. Las claves de un verdadero fenómeno futbolístico.
“Papá, hoy juega Argentina” me recuerda mi hijo de apenas 7 años al despertarse. Impensado unos años atrás. Tal vez la frase era la misma, pero la impronta hubiera sido otra, de desazón, desesperanza, aplomo y hasta de desilusión.
Hoy tachamos los días en el calendario que está pegado a la heladera, las entradas vuelan en apenas minutos. Cuesta encontrar fenómenos mundiales en torno a una selección, Argentina una vez más, es ese motivo de análisis científico que cuesta analizar y entender.
La mudanza a la «Bombonera» era toda una incertidumbre. Primero por saber en qué condiciones se encontraba el estadio, pero también por ser un reducto que cuesta ser relacionado a la albiceleste.
Rompiendo toda regla y hasta desafiando, una vez, a la ciencia, Scaloni, Messi y compañía fueron a la Boca y fue una fiesta, pocas veces antes vista.
Cuando digo que ésta selección rompe cualquier molde o situación que pueda ser analizada, es realmente real. Y eso también ilusiona.
La eliminatoria para Argentina se cerrará este martes 20.30 horas cuando visite a Ecuador, en lo que también será una fiesta ya que la selección que dirige Gustavo Alfaro consiguió pasaporte directo a Qatar la semana pasada.
Argentina ostenta un record increíble de 30 partidos. Es conveniente llegar a Qatar con esa condición? Para quien suscribe la presente, no.
Se viene el roce Europeo, algo necesario para tomar real dimensión de nuestro potencial.
El 1° de Junio en Wembley, Argentina enfrentará a la recientemente eliminada Italia. Todo examen es necesario y oportuno para seguir acrecentando la ilusión y consolidar una idea futbolística revolucionaria desde la teoría a la practica.