Por Matías Pouso (Corresponsal LBD en CABA)
El conjunto galo se coronó por décima vez del mundial por equipos del tenis, Lucas Pouille fue el gran héroe al vencer en el quinto punto a Steve Darcis por 6-3, 6-1 y 6-0 para sellar la victoria en el quinto punto de la serie.
La Ensaladera de Plata lleva tallado un nuevo/viejo nombre en su base a partir de este domingo.
Francia volvió a anotar su nombre como el mejor equipo de la temporada, al vencer en la final a la sorprendente Bélgica, comandada por su estrella David Goffin.
La jornada del viernes quedó en tablas gracias a las victorias de los dos números uno, Goffin derrotó fácil a Lucas Pouille en tres sets y Jo-Wilfried Tsonga hizo lo propio frente a Steve Darcis.
El sábado los franceses se adelantaron gracias a la victoria de la dupla Gasquet-Herbert por sobre Bemelmans-De Loore en cuatro sets.
Todo debió definirse en un superdomingo, ahí Goffin igualó la serie con una victoria sin atenuantes frente a Jo-Wilfried Tsonga por 7-6 (5), 6-3 y 6-2 en dos horas y 44 minutos, en el duelo entre los dos números uno.
La victoria del finalista del Masters de Londres hizo que Lucas Pouille y Steve Darcis tuvieron que dirimir al campeón de la Davis.
El local no le dio opción a su rival en ningún momento y desató la fiesta para todo el público galo presente en Lille.
Fue una verdadera paliza, el escenario adverso le jugó muy en contra al belga que tan solo pudo ganar cuatro games en todo el encuentro.
Pouille, que no concedió a su rival ninguna oportunidad de quiebre, cerró la victoria después de una hora y 34 minutos para llevar a Francia a levantar la Ensaladera por décima vez.
Bélgica buscaba su primer título en la segunda final que disputaban, pero se topó con un equipo muy unido y apoyado fervientemente por su gente.
Capitaneado por Yannick Noah y con un cuarteto formado por Jo-Wilfried Tsonga, Lucas Pouille, Richard Gasquet y Herbert Pierre Hughes, Francia volvió a lo más alto del tenis mundial, algo que no sucedía desde el 2001 (perdió las finales del 2002 con Rusia, del 2010 contra Serbia y del 2014 ante Suiza).
Este décimo título le permitió a los franceses igualar a Gran Bretaña como tercer país que más triunfos ha conseguido en esta competición, quedando solo detrás de Estados Unidos (32) y Australia (28).