Por Matías Pouso (Corresponsal LBD en CABA)
El equipo helvético se encuentra a un paso de entrar en la historia de la Copa Davis, de la mano de Stan Wawrinka y Roger Federer los suizos están 2-1 sobre Francia en la final de la competencia más importante por equipos en el tenis. Las fotos son gentileza sitio Copa Davis.

Luego de una jornada de viernes en la que el ladero se convirtió en el héroe, los dos magníficos de los alpes unieron sus fuerzas este sábado y le dieron a su nación una ventaja sumamente importante de cara a lo que sería una proeza histórica para el tenis suizo.

Stanislas Wawrinka había adelantado a los visitantes con una contundente victoria por 6-1, 3-6, 6-3 y 6-2 contra Jo-Wilfried Tsonga en el partido inaugural. El número 4 del mundo, continuó con el nivel que lo llevó a las semifinales del torneo de Maestros la semana pasada mientras batallaba contra los cañonazos del galo. Así consiguió el primer quiebre en el tercer juego y jugando con los nervios de su oponente pegando un winner tras otro pudo quedarse con el primer set en 26’.

Sin embargo, en el segundo set el orgullo del clon de Muhammad Alí se vio claramente tocado y salió a comerse a su rival tomando una pronta ventaja 3-1. El renacimiento francés no solo se dio dentro del court sino también en las tribunas, los locales rugieron bien fuerte cuando Tsonga igualó el marcador gracias a un servicio de 203 km/h.

Cuando parecía que Tsonga tenía todo para ganarlo, Wawrinka sacó a relucir un arma que en gran parte de su carrera le jugó en contra, pero que en el último año lo llevó al lugar que ocupa en la actualidad del mundo del tenis, su cabeza.

Con poderosos golpes de fondo y una clara estrategia agresiva se puso nuevamente en ventaja en el cotejo. Ventaja que luego capitalizaría en el cuarto set de manera fugaz ganando cinco de los primeros siete games de la manga.

Finalmente, luego de dos horas y 24 minutos de juego, le entregó el primer punto a Suiza luego de que su volea coqueteara con la red y terminara en el campo rival.

Apenas finalizado ese partido, Gael Monfils tuvo una de las mejores actuaciones de su carrera al derrotar a Roger Federer por 6-1, 6-4 y 6-3 e igualar en uno el tanteador en la gran final disputada en Lille.

La Pantera Monfils tuvo un gran comienzo con su servicio y con sus passing shots de revés, golpe con el que consiguió el primer break point en el cuarto juego. Inspirado por el apoyo del fervoroso público, Gael afirmó más tarde la doble ruptura de saque y se puso 5-1, luego con un mini show de aces consecutivos cerró la primera manga en 30 minutos.

Federer siguió luchando pero cedió nuevamente su saque en el tercer juego del segundo set, se lo veía muy falto de movilidad como para devolver la durísima y profunda derecha de Monfils. Tan solo un quiebre le bastó al parisino para ponerse dos sets arriba del suizo.

El camino ya estaba allanado, y no hubo lugar para sorpresas en el tercer y definitivo parcial. Una vez que se adelantó 4-2 ya no le dio posibilidades a un Federer entregado. La serie quedaba igualada y el doble sería vital para determinar de qué lado caería el favoritísimo en esta serie.

Julien Benneateau y Richard Gasquet fueron los elegidos por el lado francés; en tanto que el capitán suizo mandó a la cancha a Wawrinka y Federer apostando un pleno ya que los visitantes no poseen el recambio de jugadores que sí tiene el equipo local.
Y vaya si rindió la apuesta de Severin Luthi que su dupla apabulló a la pareja gala y puso match point a Suiza por primera vez en su historia. Los ganadores de la medalla dorada en Beijing 2008 se quedaron con el tercer punto con un contundente 6-3, 7-5 y 6-4.

Wawrinka, impulsado por la confianza de vencer a Tsonga el viernes entró al court con sus cañones listos para bombardear a los franceses y con un Federer tan coordinado que hizo olvidar rápidamente su pálida actuación del día anterior. Por su parte, a Benneteau y Gasquet se los veía superados por la situación y el contexto, tal fue así que no pudieron concretar ninguna de las cinco oportunidades de quiebre que tuvieron.

Federer y Wawrinka también pusieron fin a una racha de cuatro derrotas jugando juntos en la Copa Davis, y ganaron su primer partido como pareja sobre polvo de ladrillo. No perdieron su saque en ninguna oportunidad, y dominaron los puntos cruciales para resistir los intentos de embate de la dupla francesa, sobre todo en el segundo set.

La serie se definirá el domingo con los duelos de singles entre Roger Federer y Jo-Wilfried Tsonga, en un partido que puede darle su primera Davis a Suiza; luego, de ser necesario, Wawrinka chocará ante Gael Monfils.

La ensaladera está servida para los helvéticos, los galos por su parte tendrán que hacer pesar su localía y la estirpe copera que los llevó a ganar esta competencia en nueve ocasiones.