Argentina cayó ante Francia por 21 a 28 en su cuarta presentación. Si bien pudo revertir el primer tiempo que empezó perdiendo con un parcial de 7 a 0 , luego llegó a achicar la diferencia ante el campeón Olímpico y Europeo. Sin chances alguna se despedira ante Egipto el domingo a las 6 de la mañana.

Si se hace un repaso del partido, los argentinos comenzaron muy mal ya que tuvo muchas veces con tiros directos y no pudo convertir, mientras que cada atajada, hacía más gigante al arquero francés Gerard dueño de mil batallas en este deporte.

Tanto fue el desconcierto desde el banco, que el técnico Milano pidió dos tiempos extras para poder acomodar las ideas.

Luego de este bajón y con el cambio de arquero por jugador para darle hombre de campo más, pudo poner en partido a «Los Gladiadores». Se fueron al descanso del medio tiempo con un marcador de 8 a 15 abajo.

El ingreso de Juan Bar en el arco durante el complemento y una mejor organización de los ataques con Parker como jugador destacado con 7 goles y Pablo Simonet con 5 goles.  Argentina fue mejorando su andar a lo largo del segundo tiempo.

También debemos decir que Francia no es la que era otrora y este hubiese sido el partido para poder ganarle. Si vemos la estadística del partido, el gran tema sigue siendo la eficacia. El partido terminó con un marcador final de 28 a 21 a favor de los galos.

Argentina jugará el último partido ante Egipto, pero sin chances de clasificación. El 4 de agosto a partir de las 6 de la mañana.

Repasando algunas notas realizadas a nuestros jugadores luego del partido, tenemos que ser muy objetivos al decir que Argentina hace lo máximo dentro de sus posibilidades.

Es muy difícil mantenerse en cuatro Juegos Olimpicos seguidos habiendo hecho las cosas mal. La mayoría de estos jugadores juegan en la Liga Europea, pero su contacto con equipos de nivel de selección es solo cuando previo a un mundial u olimpíadas.

Quiero cerrar esta nota como la titulé, de un comentario que hizo Federico Pizarro a un medio de prensa: 

«Es un problema que venimos teniendo ya hace tiempo el de la definición, se nota aún más cuando estás al máximo nivel. Creo que Argentina sigue compitiendo, pero el techo está un poco alto. Obviamente intentamos dejar todo adentro, cada uno que entra intenta realmente lo mejor, pero a veces no alcanza, son mejores que nosotros y eso no pasa nada si lo decimos. Hay que disfrutar estar acá, es el milagro gladiador que hace que después de cuatro Juegos Olímpicos sigamos estando acá»