

Argentina se metió en los Cuartos de Final del Mundial Sub 20 que se disputa en tierra trasandina. La Sub 20 de Diego Placente se floreó con un hermoso 4 a 0 ante los africanos llegando a la siguiente instancia como uno de las candidatos al titulo.
En una noche perfecta, la Argentina Sub 20 desplegó todo su potencial venciéndo por 4 a 0 a Nigeria en el estadio Nacional «Julio Martínez Prádanos», asegurando su clasificación a los Cuartos de Final del Mundial que se disputa en Chile.
El equipo dirigido por Diego Placente impuso condiciones desde el primer minuto y consiguió una victoria que tuvo aroma a revancha, recordando aquella eliminación sufrida frente a los africanos en 2023.
El partido comenzó de manera ideal para la «Albiceleste». A los dos minutos, Alejo Sarco aprovechó una desatención defensiva para abrir el marcador y encaminar el trámite.
Lejos de conformarse, siguió presionando alto y Maher Carrizo, una de las figuras del torneo, amplió la ventaja con un doblete, a los 23 y 53 minutos de juego, que dejó sin respuesta al conjunto nigeriano.
El cuarto tanto llegó a los 66, obra de Mateo Silvetti, tras una precisa asistencia de Gianluca Prestianni, que volvió a ser determinante en el frente ofensivo.
La Selección Nacional fue superior en todos los aspectos del juego. Dominó la posesión, circuló la pelota con paciencia y fue contundente cuando tuvo que serlo.
Nigeria, que venía de una buena fase de grupos, se vio superada en intensidad y nunca logró generar peligro serio en el arco argentino.
Cada intento africano fue neutralizado por la sólida defensa liderada por Tobias Ramirez y Valente Pierani, mientras que en el mediocampo destacaron Ignacio Echeverri y Valentín Carboni, piezas claves en la recuperación y distribución del balón.
Este triunfo tiene un sabor especial; En el Mundial Sub 20 de 2023, disputado en Argentina, Nigeria había eliminado al conjunto local por 2-0 en los Octavos de Final, dejando una herida abierta.
Dos años después, el equipo de Placente logró su revancha de manera contundente, demostrando madurez, ambición y una clara evolución futbolística.
Además, con esta victoria, prolonga su invicto en el torneo, ya que venía de ganar todos sus partidos en la fase de grupos frente a Cuba, Australia e Italia.
Los números respaldan el dominio argentino: mayor precisión en los pases, más remates al arco y una eficacia notable frente al gol. Pero más allá de las estadísticas, lo que más ilusiona es la forma.
Juega con identidad, presiona alto, se defiende en bloque y muestra variantes ofensivas que le permiten adaptarse a diferentes rivales.
Con este nuevo triunfo se mete entre los ocho mejores del mundo y enfrentará a México en la siguiente instancia, en un duelo que promete intensidad y buen fútbol.
La ilusión crece y el equipo de Placente se anima a soñar con repetir viejas gestas, en busca de un nuevo título mundial en la categoría.
Goleó, gustó y se vengó. En Santiago, el conjunto juvenil volvió a confirmar que el futuro de la camiseta «Celeste y Blanca está más vivo que nunca.