Luego de una carrera que parecía definirse temprano, el medio mecánico dijo basta y dejó al fueguino Lucas Bonetto con las manos vacías cuando estaba a un paso de festejar su cuarta corona consecutiva en el Desafío Ruta 40. Fuente y foto Prensa Lucas Bonetto.
Solamente quedaba una etapa y algo más de doscientos kilómetros para festejar un triunfo que sería inolvidable, pero las carreras no terminan hasta que se baja la bandera y, lamentablemente, la fortuna no quiso estar de nuestro lado. Primero una pinchadura y luego la rotura de la planta impulsora del Honda 700 echaron por tierra la ilusión de levantar el cuarto trofeo en esta mítica competencia. Seguir leyendo Fierros ingratos